El dramaturgo Francisco Jesús Becerra Rodríguez, mejor conocido como Paco Bezerra, se ha situado en el centro de los focos mediáticos debido a la censura ideológica por parte de la Comunidad de Madrid a su obra Muero porque no muero. La vida doble de Teresa (2022, Fundación SGAE, Madrid). Aunque Bezerra no se haya dado a conocer ampliamente hasta ahora, su trayectoria es de largo recorrido. El almeriense nacido en 1978 ha sido galardonado, entre otras menciones, con el Premio Nacional de Literatura Dramática (2009) y el Premio Nacional de Teatro Calderón de la Barca (2007); y más recientemente, a propósito de la obra aquí reseñada, con el XXX Premio SGAE de Teatro Jardiel Poncela. Entre otros títulos del mismo autor caben destacar El pequeño Poni (Antígona, 2018, Madrid), Grooming (Artezblai Editorial, 2012, Bilbao) ―adaptada al cine bajo el título de La desconocida (2023)― o Dentro de la tierra (Centro de Documentación Teatral, 2008, Madrid). Todos ellos aparecen ahora recogidos en Velocidad mínima: el teatro viene después (2022, La uña rota, Segovia).
Ya desde las primeras páginas, es muy notable el vasto conocimiento que despliega el autor sobre la abulense, siendo, irónicamente, la ausencia de compresión de la obra y vida de la Santa la punta de lanza del ataque de las mismas personas que articularon la censura de su obra. Paco Bezerra tuvo la oportunidad de defenderse ante estas acusaciones en una comparecencia ante la Asamblea de Madrid alegando que él, a diferencia de ellos, sí había leído su obra. Asimismo, en una entrevista para el periódico El Público añadiría: «No soy un rojo quemaiglesias, respeto más a Santa Teresa que Vox y el PP» (Bezerra, 2022).
Una aproximación
La obra narra la resurrección de Santa Teresa de Jesús dentro de nuestra sociedad donde, en palabras del autor, viéndose sin documentación y sin trabajo, el «propio sistema la arrastraría de la indigencia al alcoholismo, del alcoholismo a la drogadicción, y de la drogadicción a la prostitución» (Bezerra, 2022). Tras su paso por la cárcel, encontraría su vocación en ser DJ (pues es de Jesús) y establecer casas okupas feministas, libres de hombres, donde, en comunión, ascender a lo místico. Durante este trayecto, se despliega toda una lograda crítica a la Inquisición, las falsas apariencias en el seno católico y nuestra sociedad actual no sin establecer paralelismos con la del S.XVI.
Estructurada en 42 episodios monologados ante un teatro (por lo que la representación viene implícita en el propio texto, más allá de ser teatral), tal y como lo concibo, podrían establecerse tres partes. La primera de ellas (1-14) esboza una biografía del personaje real de Santa Teresa explicando su paso por el convento y disputa con la Inquisición; la segunda (15-22) comienza con la resurrección de la protagonista en el S.XXI; aquí deberá buscar las partes del cuerpo que le usurparon para finalmente verse empujada al alcoholismo, drogadicción y prostitución no sin antes ser víctima de una violación. En la tercera parte (23-42), al verse a sí misma en un cártel pudiendo confirmar su identidad (que ya conocía previamente debido a recuerdos que iban retornando), comienza una reivindicación de las escritoras españolas olvidadas que le conduce al aprisionamiento. Conseguirá escapar para convertirse en monologuista y posteriormente dj-okupa. En el último episodio, se realiza una reflexión sobre la figura de Santa Teresa a la par que el teatro se convierte en un santuario donde el baile propicia la ascensión.
Es importante mencionar que el propio autor titula el episodio 14 como Fin de la primera parte; por lo que podría pensarse que su intención era dividir la obra en dos (Vida/Resurrección), pues no se realiza ninguna otra división de este tipo en los títulos. Sin embargo, creo que es importante hacer notar que hasta el episodio 23 la protagonista no confirma del todo su identidad, lo que supondrá un radical cambio en cómo plantea su vida.
Un juego de espejos
En realidad, la obra comienza in medias res. Debe distinguirse entre los hechos acontecidos y la narración de los mismos, que es lógicamente posterior. Así, los sucesos de la primera parte transcurren en el S.XVI y los de la segunda y tercera parte en el S.XXI. La narración, por tanto, comenzaría en el tiempo histórico actual para remontarse al pasado y luego volver a nuestra sociedad. Este esquema no deja de proponer algunas incógnitas. Al comienzo de la obra se anota: «Una mujer de entre quince y sesenta y seis años se dirige a un auditorio de personas de ambos sexos y distintas edades». (Bezerra, 2022: 17) Y al final: «El teatro, en este momento, ya no es un teatro, es un santuario…» (Bezerra, 2022: 49) ¿Por qué habría hombres en este santuario cuando, precisamente, como se insiste en la obra, Santa Teresa los okupó para que no entrasen? Además, será tras la revelación mística en el santuario okupado de Beas del Segura ―si se entiende que el «allí» (Bezerra, 2022: 47) que se menciona se refiere a este― donde termine la narración; pero se continuará la acción mediante notas que relatan el baile y conversión del teatro en santuario. ¿Debe creerse entonces que el teatro era, desde un principio, el santuario de Beas del Segura? No parece lógico puesto que habría hombres en él; pero tampoco lo es pensar que el «gozo inefable» (Bezerra, 2022: 48) que le posee no sea producto de la misma revelación mística.
¿Santa Teresa o Teresa?
Otra cuestión a tratar es la veracidad de los hechos narrados; o, más bien, la veracidad que cada lector quiera otorgarle a la protagonista. En el antepenúltimo episodio, Los caminos del Señor son inescrutables, puede leerse: «¿Y si los demás estuviesen en lo cierto y fuese yo la equivocada?, ¿y si, como todo el mundo dice, fuese una demente y no una santa de verdad? ¿Tan segura estoy de ser quien soy?» (Bezerra, 2022: 46). Es constante el paralelismo entre la ingesta de productos estupefacientes y la ascensión mística. Revelador es el comentario del propio autor:
Cuando te drogas y bailas, te olvidas de lo mundano y aspiras a lo místico; prescindes del cuerpo para entrar en comunión con otras realidades que tienen que ver con lo psicodélico y con las visiones. De ahí la conexión del LSD con el pan de centeno con cornezuelo que ella comía. Al final, todo está hilado y tiene un sentido, no es gratuito (Bezerra, 2020).
Al final de la obra, durante la revelación mística, la paloma expresa: «Teresa, si realmente fuiste una santa que no paró de buscar a Dios o simplemente una mujer que solo se buscó a sí misma, ¿qué importancia tiene?» (Bezerra, 2020: 48). El propio autor nos da la opción de que desde el primer momento, no esté hablando Santa Teresa resucitada sino una mujer que, motivada por la ingesta de LSD, crea serlo. Recuérdese, en cualquier caso, que el título de la obra remite a Teresa y no a Santa Teresa.
«A salvo entre los muros», o no…
A lo largo de la obra, Bezerra establece una serie de logrados paralelismos históricos entre el S.XVI y el XXI en cuatro niveles diferentes: 1) convento/cárcel, chabola, habitación; 2) ascensión, rezo/música, LSD, libro; 3) crear conventos libres/ okupar; 4) Inquisición/policía.
Merece la pena detenerse en el primero de ellos. En el sexto episodio, Jardín interior, la protagonista declara sentirse «a salvo entre los muros del convento» (Bezerra, 2022: 20). Este ingenioso oxímoron guarda las mecánicas de explotación de las que las mujeres eran víctimas en el S.XVI ―y en la actualidad, como se desarrollará. Santa Teresa, antes muerta que casada con un hombre, se ve empujada a, como única alternativa, a ingresar en un convento; pero «no porque haya sentido la llamada de Dios, sino porque el matrimonio me parece una esclavitud» (Bezerra, 2020: 19). Creyéndose ahora protegida, se ve obligada a mantener relaciones sexuales no consentidas ―lo que, llanamente, se conoce como violación― para poder pagar las rentas, por el bien del monasterio. Lo que, en un principio, se concibe como un ejercicio de espíritu y rechazo a los bienes mundanales, no está exento de las mecánicas del capitalismo incipiente.
¿En qué sentido se establece el paralelismo con nuestra sociedad actual? Se ha explicado en un principio que, víctima del sistema, es empujada a prisión. La diferencia radical reside en que ahora no es una cuestión de “elección” (si la alternativa entre A y B puede categorizarse así) sino una total imposición que se legitima bajo las leyes “democráticas” que, como tal, son inalterables e incuestionables. La prisión se presentará como un lugar más ameno que el convento; allí podrá leer sobre su propia historia y cómo el fascismo le dio la vuelta.
Conclusión
Pese a las acusaciones en un primer momento enunciadas, lejos de denigrar el autor a la Santa, la trata con una gran sensibilidad, admiración y conocimiento. Su ejemplo es símbolo de resistencia contra la reescritura y apropiación de la historia por quienes, paradójicamente, parecen no conocerla y, al no aceptar otras miradas, censuran a cuantos, en su opinión, se les enfrentan: eso sí, nuestro autor se sirve de la palabra, no de la censura, más propia de la Inquisición, el fascismo, PP y Vox: las máscaras bajo las que, a lo largo de la historia, se articula la opresión.
Con esta serie de apuntes breves se ha pretendido movilizar a la lectura del texto; facilitar un conjunto de herramientas claves para su análisis y su planteamiento crítico. Son otras muchas las cuestiones que pueden extraerse de esta obra y que, sin duda, siendo de gran interés, son igualmente de gran utilidad. Entendiendo el texto literario no solo como un pieza artística sino como un producto ideológico, uno es capaz de vislumbrar cómo ciertas prácticas políticas que creíamos enterradas siguen más vivas que nunca, escondidas bajo otros nombres, otros lugares, otros siglos.
Bibliografía
Bezerra, P. (2022). Muero porque no muero. La vida doble de Teresa, Fundación SGAE, Madrid.
Intervenciones. (2022). Paco Bezerra en Sesión Comisión de Cultura de Asamblea de Madrid sobre situación libertad artística. Youtube. https://www.youtube.com/watch?v=9LT_EuD6Y3w (última entrada: 01/04/2023)
Mariño, H. (2022). Paco Bezerra: «No soy un rojo quemaiglesias, respeto más a Santa Teresa que Vox y el PP», El Público. https://www.publico.es/culturas/paco-bezerra-muero-no-muero-santa-teresa.html (última entrada: 01/04/2023).