Reseña de vuELA. Esperanza de vida, de Mae López

Después de escribir «Dirige tu tiempo. Cómo conseguir tiempo para lo que quieres en solo 4 semanas», llegó a mi mente la idea de escribir una novela. Tenía varias ideas, pero la realidad de la ELA me rondaba a cada instante de una forma tan intensa, que supe que tenía que escribir sobre ello.

Escribir una novela es una aventura, en la que vives una vida paralela, donde creas, sufres, te emocionas… un viaje con sus personajes por sus periplos, y cuando tus personajes son una buena compañía, como es el caso, el camino es hermoso.

Sabía que escribir y publicar supondría un gran esfuerzo (investigar, organizar, corregir, gestionar), y así ha sido, pero ahora me siento satisfecha, porque creo que he escrito algo bueno y que, al mismo tiempo, estoy colaborando en difundir una situación que necesita darse a conocer.

Sinopsis

Fran se encuentra en un buen momento de su vida: su negocio (La Taberna del Faro) le permite vivir bien, sus clientes disfrutan con sus bromas, hace deporte, es sociable, aún le consideran atractivo. Tal vez la relación con su hijo preadolescente es mejorable, y la relación con su ex, pero el balance le gusta.

Hasta que comienza a fallarle una mano. Acude al médico, pero no encuentran qué le ocurre hasta que, tras meses de visitas, consigue un diagnóstico: una enfermedad neurológica progresiva y degenerativa. No le puede estar pasando eso, hasta ahora todo tenía solución. Pero el doctor dice que su enfermedad (ELA) es incurable y su búsqueda en internet no le da esperanzas.

Su vida se convierte en un avance a contrarreloj. Le quedan meses de vida en los que cada vez estará peor físicamente. Hundido pero consciente de esta realidad, siente que es ahora cuando debe disfrutar de su fortaleza física. Aún puede, por ejemplo, viajar, pero pronto no podrá. Y se obliga a encontrar resquicios de esperanza, sabiendo que debe luchar, entender y convivir con sus limitaciones.

Una novela emocionante con la que viajar por los temores y la angustia que genera la Esclerosis Lateral Amiotrófica (ELA).

Animado por el humor y la ironía de Fran, las relaciones que construye y sus ganas de vivir, «Vuela. Esperanza de vida» quiere aportar un mensaje de esperanza a los luchadores que batallan contra la ELA.

La trama

La historia arranca con Fran en una sesión de entrenamiento, angustiado porque sabe que su enfermedad acabará con su vida en pocos años.
Recuerda cómo han sido sus meses anteriores, cuando vivía despreocupado, atendiendo su Taberna del Faro, entre clientes que casi son amigos. Pero cuando le diagnosticaron ELA, su mundo se desmoronó.

«Me despierto con la tímida esperanza de que haya sido un mal sueño. Pero no.» Pide una segunda opinión que le mantiene en tensa espera pero que, al final, ratifica el diagnóstico. La realidad le aplasta. Consciente de que físicamente empeorará, sabe que tendrá que tomar una decisión.

Comparte sus inquietudes con Meghan, una clienta de La Taberna, estudiante de periodismo, que representa la juventud y la diversión que él anhela. Y decide que debe estirar los días de salud que le queden.

En ocasiones envidia lo que ya no tiene: «lamento no haber forzado las posibilidades de mi cuerpo mientras pude», pero, aunque por momentos los pensamientos se tornen negativos, se reconduce a aligerarlos. También, a medida que avanza la historia, vemos cómo reaccionan las personas que le rodean ante su nueva realidad, qué opciones tiene, y qué decisiones deberá tomar.

Construcción del relato

La obra inicia con un flashback: Fran en el momento actual haciendo deporte, angustiado porque conoce su diagnóstico. Luego vuelve a unos meses atrás, cuando vivía despreocupado. Y continúa en el presente, buscando soluciones para su enfermedad y temeroso de compartir sus miedos.

Nos encontramos ante una obra que podríamos enclavar dentro del llamado «realismo» o «drama» contemporáneo. La historia de Fran, un hombre que enferma de ELA y ve cómo su vida, poco a poco, va cambiando a causa de la enfermedad.

La autora ha optado por una estructura clásica en tres actos y ha elegido una focalización interna para los narradores, contando la historia en primera persona y en presente. Esta elección, al girar la historia en torno a Fran y su enfermedad, ayuda a empatizar más al lector, a «sentir» como el protagonista y ver las distintas circunstancias desde su perspectiva. Del mismo modo, los otros personajes que hablan en primera persona (su hijo Hugo, su clienta Meghan y su doctora Aura) ofrecen diferentes puntos de vista de la realidad.

El relato tiene varias vertientes. Por un lado, es un relato de superación personal, y muestra cómo el ser humano se puede adaptar a sus circunstancias. Por otro lado, es un homenaje a los que padecen esta enfermedad, sus cuidadores y los profesionales de las especialidades que intervienen. En tercer lugar, quiere dar visibilidad a la ELA. Y, por último, cuenta una buena historia, que no puedo desvelar sin contar el final.

La narrativa es fresca y el lenguaje coloquial, salpicado por algunos términos médicos que se explican sin dificultad dentro de los diálogos de los personajes.
El ritmo es vibrante en ocasiones, pausado en otras, guiada mediante capítulos cortos que se imprimen un ritmo ágil a la lectura.

Los protagonistas de «vuELA. Esperanza de vida»

Fran, camarero y empresario, que ve cómo su vida se transforma al saber que padece una enfermedad que paralizará sus músculos.

Hugo, el hijo de Fran, cuyo mundo era sencillo entre el instituto y los videojuegos, y de pronto, su padre parece que va a necesitarle. Hugo no quiere complicarse y no sabe cómo reaccionar.

Meghan, estudiante de periodismo, clienta del local de Fran, con quien Fran comparte sus primeros temores. Meghan es fresca y divertida y se convierte en un soplo de aire fresco para Fran.

Aura, neuróloga especialista en enfermedades raras, mientras realiza su trabajo de manera profesional, sufre al pensar que no puede curar algunas enfermedades.

Mi opinión

La novela atrapa, luchando en la mente de Fran y descubriendo realidades sobre esta enfermedad cuyos entresijos sorprenden.

El cierre de cada capítulo impide que decaiga la atención, consiguiendo que se espere con ansia retomar la historia, y mantiene la intriga hasta el final.

La historia, que pone al límite a Fran, ayuda a valorar la vida. A destacar los personajes cautivadores que alientan y acompañan. Una novela que se lee de un tirón, con una montaña rusa de emociones, y cuya lectura se disfruta.

El final, cerrando las subtramas que han ido apareciendo, lo convierte en un libro muy recomendable.

Otro libro destacable de la autora:

«Dirige tu tiempo. Cómo conseguir tiempo para lo que quieres en solo 4 semanas».